Son en total cinco ermitas y hay de todo, más normales y muy especiales. Personalmente creo que la de más valor es El Plano de Salas Bajas, pues queda una crujía de un antiguo cenobio románico tardío, pero la más bonita es sin duda Nuestra Señora de Dulcis en Buera
He buscado por internet y no he encontrado referencias pero yo al menos conozco la tradición oral de que la Virgen de Dulcis tenía el don del habla, por eso los niños que tardaban en hablar se llevaban allí.
Del edificio anexo a la ermita donde supongo que hubo eremitas como en la mayoría de las ermitas por esta zona no queda apenas nada, unos arcos de piedras sillares que supongo se salvaron por su monumentalidad, y es que al restaurar el edificio en los noventa se encontraba muy deteriorado y se decidió demolerlo.
La ermita por su interior es barroca, según dice Wikipedia, yo no he entrado, pero el exterior es ideal para pasar una jornada primaveral con los amigos. Buenos accesos y aparcamiento, merendero grande bajo enormes encimas, hasta con una fuente que por cierto esta seca, y si buscamos entretenimiento tenemos el llamado Bosque de los Olivos donde a través de paneles se muestran una gran variedad de especies de olivo.
Aunque el mejor entretenimiento es el mismo lugar, hermoso, arbolado y tranquilo.
Espero que las fotos hagan justicia al lugar.
1 comentario:
interesante paseo, creo que tomaré la idea de subir a Dulcis con los amigos a comer bajo las encinas y/o a disfrutar durante el paseo de los aromas de las matillas que crecen por esas tierras, aportando olores y colores primaverales
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